Los productos de apoyo y su contribución a las enfermedades neuromusculares

Un producto de apoyo (anteriormente conocido como ayuda técnica) se define como "cualquier producto (incluyendo dispositivos, equipo, instrumentos, tecnologías y software) fabricado especialmente o disponible en el mercado, para prevenir, compensar, controlar, mitigar o neutralizar deficiencias, limitaciones en la actividad y restricciones en la participación"

Esta definición y la clasificación de los productos de apoyo han sido determinados por una nueva norma de la AENOR (Agencia Española de Normalización y Certificación).

¿Cómo se clasifican los productos de apoyo?

La Norma ISO 9999 establece varias categorías de los productos de apoyo, en las que incluye subcategorías, específicamente numeradas:

Las principales categorías para clasificar a los productos de apoyo son:

1. Productos para el tratamiento médico personalizado. Por ejemplo aparatos para partir pastillas o cojines para prevenir las úlceras por presión.
   
2. Productos de apoyo para el entrenamiento/aprendizaje de capacidades. Por ejemplo diferentes contenidos audivisuales para el aprendizaje de la lengua de signos o de los símbolos pictográficos.


3. Ortesis y prótesis. Por ejemplo, los corsés para el tronco.



4. Productos de apoyo para el cuidado y la protección personales. Por ejemplo, peines de mango largo, calzamedias, abrochabotones...





5. Productos de apoyo para la movilidad personal. Por ejemplo, sillas de ruedas, andadores, muletas, ayudas para las tansferencias...






6. Productos de apoyo para actividades domésticas. Por ejemplo, cubiertos adaptados, vasos con doble asa, sujeta tetrabricks, abridores de diversos tipos, peladores...






7. Mobiliario y adaptaciones para viviendas y otros inmuebles. Por ejemplo, camas eléctricas, dispositivos de domótica para abrir y cerrar puertas, encender y apagar las luces...




8. Productos de apoyo para la información y la comunicación. Por ejemplo, teléfonos adaptados, adaptaciones para la escritura, dispositivos de acceso al ordenador...



9. Productos de apoyo para la manipulación de objetos y dispositivos. Por ejemplo, ayudas para alcanzar objetos a distancia, giradores de puertas o de grifos...



10. Productos de apoyo para mejorar el ambiente, herramientas y máquinas. Por ejemplo, las cintas métricas


11. Productos de apoyo para el esparcimiento. Por ejemplo juegos y jueguetes adaptados.

Como se puede ver en estas líneas existen una amplia variedad de dispositivos que pueden facilitar la realización de múltiples tareas a las personas con enfermedades neuromusculares.

El nivel de uso de estos productos de apoyo es reducido, en comparación con los beneficios que las personas con diversidad funcional podrían obtener de los mismos.

Existen varias razones que explican este escaso nivel de uso: el elevado precio de los productos, falta de información de los usuarios sobre cuáles son los productos más adecuados, dónde adquirirlos y cómo utilizarlos y la escasa diversificiación en este mercado.

Para el primer problema, existen varias soluciones: una de ellas es la solicitud de una de las ayudas individuales (de convocatoria anual) que establece cada comunidad autónoma y que se suelen vincular a los servicios sociales o de bienestar social (el trabajador social es quién mejor os puede informar de este tipo de ayudas económicas).

Por otra parte, en la imaginación está el poder y, en muchas ocasiones, con tener una idea clara de lo que se necesita (por ejemplo, un dispositivo para alcanzar las cosas del suelo) y un buen "manitas" de mano que confeccione de forma casera esta ayuda (por ejemplo utilizar una antena de radio extensible para el alcance de estos objetos). Por eso, os recomendamos que le echéis un vistazo a esta página web: http://recursosdebajocoste.es/ en la que encontraréis ejemplos de "productos de apoyo caseros" y de bajo coste.

La falta de información sobre los productos de apoyo puede verse compensada con la figura de los terapeutas ocupacionales. Estos profesionales, graduados y diplomados universitarios, ponen todas sus herramientas a vuestro alcance para asesoraros sobre el mejor producto de apoyo para vuestra necesidad. Para ello, siguen un proceso:

1. Estudio de las capacidades de la persona afectada.


2. Estudio de las necesidades del cuidador.


3. Estudio y análisis del entorno físico y social de la persona afectada.


4. Análisis de las opciones existentes en el mercado de las ayudas técnicas o productos de apoyo.


5. Recomendación al usuario del producto de apoyo más adecuado a sus necesidades (incluso asesoramiento en la confección casera de esta ayuda técnica).


6. Entrenamiento en el uso de este producto de apoyo y asesoramiento para su mantenimiento.

Los socios de cualquier entidad de la Federación ASEM pueden beneficiarse de este servicio gracias al poryecto PrevenTO.

Si necesitáis un asesoramiento específico sobre un producto de apoyo que os pueda ayudar a realizar las actividades cotidianas, no dudéis en poneros en contacto con vuestra entidad ASEM de referencia o enviar un email a toasemga@gmail.com.

Estaremos encantados de poder ayudarte.

En este Blog iremos publicando, sucesivamente, información sobre diversos productos de apoyo que pueden mejorar la autonomía personal de las personas con enfermedades neuromusculares